LUGAR: OPORTO
FECHA DE LA ESTANCIA: DICIEMBRE 2010
Este moderno hotel se encuentra a las afueras de Oporto, como a unos 5,5 Km del Puente de Luis I o de la zona de Aliados. Además, tiene una parada de metro (la del hospital) a unos 5-10 minutos andando que lleva a la estación de Sao Bento, en pleno centro turístico.
La habitación tiene todas las comodidades de un hotel bueno, incluso de un 5 estrellas.
Tiene unas camas amplias y nuevas, con 3 almohadas cada una para elegir, una TV de LCD de 32', escritorio, armario grande, nevera, caja fuerte, terraza: todo ello con una decoración moderna y cuidada.
El baño también es muy completo, con bañera, ducha, bidé, lavabo amplio con encimera y mueble, y todas las amenities necesarias.
El buffet del desayuno tiene prácticamente de todo, con su parte de caliente, además de bollos (como los que llaman en Oporto "natas", que son iguales a los pasteles de Belem en Lisboa), bizcochos, tostadas, panes, fruta, embutidos (con mucha variedad de quesos típicos) y zumos (el de naranja es recién exprimido). Es importante decir que el servicio es bastante rápido, tanto a la hora de reponer como de preparar las mesas, porque aunque el hotel estuviera casi al 100%, no hubo que esperar ningún día para entrar.
En cuanto a la comida, tienen un buffet entre semana a 12€ que no está mal, pero merece la pena comer por el centro de Oporto, ya que es barato. Los platos de carta no son muy caros y son de mejor calidad que el buffet.
Todo el personal es muy amable, aunque alguno no sepa español siempre ponen de su parte para intentar entenderte.
Sin lugar a dudas, creemos que debe ser uno de los mejores hoteles de la ciudad y a un precio muy económico.
El SPA, por 3€, no está mal, pero es algo pequeño y cuando hay más de 5 personas se está un poco "incómodo". En la zona del bar hay dos ordenadores con internet gratuita.
La única pega es la ubicación, aunque si se va en coche, no hay problema, ya que suele haber aparcamiento por los alrederores.
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