FECHA DE LA ESTANCIA: AGOSTO 2010
Se trata de un hotel que ya tiene unos años y en ciertos aspectos se nota, como por ejemplo en la facha exterior.
Reservé este hotel pensando que al ser de la cadena solmeliá estaría bastante nuevo o por lo menos reformado, pero no fue así. La verdad es que casi todo está muy bien conservado pero con un estilo demasiado clásico. El hotel, no está mal, tiene todos los servicios de un 4 estrellas pero realmente le hace falta una reforma. Por ejemplo el secador del baño tiene más años que el teléfono de Gila...
Aunque hay que decir que es bastante amplio y además dejan mucha variedad de amenities (peine, pañuelos, set de costura, de afeitar, dental, jabones...).
Al llegar y pedir una habitación de no fumadores me dijeron que sólo les quedaban las abuhardilladas de la última planta, por cierto; no sube el ascensor hasta la sexta, pero me subieron el equipaje. Al entrar me dí cuenta que no tenía minibar y me cambiaron de habitación y al llegar a la nueva, la nevera estaba estropeada, al final me trajeron el minibar de otra habitación. Estas habitaciones, en verano, hay que dejar el aire puesto todo el día porque sino te asas.
La cama es bastante cómoda y se duerme bien, aunque al estar cerca de los ventiladores del tejado hay algo de ruido exterior. La TV de es de LCD y hay wifi gratis en todas las habitaciones.
Por último hay que decir que en temporada alta es un poco caro, si no fuera por trabajo, no creo que me alojara es este hotel.
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